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Hoy en día, es rara la marca automotriz que no tiene o que no se encuentre trabajando en el desarrollo de un vehículo 100% eléctrico, después de todo, uno de los objetivos globales a mediano plazo en materia de movilidad es migrar de autos con motor de combustión interna a modelos con fuentes de poder eléctricas. Sabiendo esto, Mini literalmente se puso las pilas y nos presentó su propuesta de vehículo eléctrico.
Sin embargo, electrificar a un miembro de la familia Mini Cooper, una marca con más de 60 años de tradición y que cuenta con miles de entusiastas alrededor del mundo no es tarea sencilla, debe tratarse de un vehículo que cumpla cabalmente con toda la herencia y valores que caracterizan a la marca, complacer en términos de diseño, de desempeño, y sobre todo debe seguir haciendo que quien lo maneje sienta que se encuentra a bordo de un go kart o de un pequeño auto de carreras. En pocas palabras, el Mini eléctrico también debe de ofrecer emoción y mucha diversión detrás del volante.
Con estos lineamientos de por medio, es como surge el Mini SE, el cual toma como base al Cooper S y que estéticamente se diferencia tan sólo por algunos detalles en amarillo fosforescente que encontramos en las carcasas de los espejos, en los emblemas y en el contorno de los rines de 17 pulgadas, los cuales, por cierto, tienen un diseño único y exclusivo para la versión eléctrica.
Al momento de subirnos al vehículo, te sientes abrazado por sus asientos tipo cubo y sabes de inmediato que los trayectos que realices serán bastante divertidos. Mientras otras marcas apuestan por diseños muy sofisticados y futuristas en el interior de sus vehículos eléctricos, Mini prefiere no meterse en complicaciones y configuró a este Mini SE prácticamente igual que al resto de sus modelos, para hacer que el conductor se sienta como en casa y que no se abrume por nuevos controles o funciones complicadas.
Oprimimos el interruptor de encendido localizado en la botonera tipo retro que se ubica por debajo de la pantalla de 8.8 pulgadas, que controla el sistema de infoentretenimiento, enlazamos nuestro smartphone mediante el Apple CarPlay para disfrutar de nuestra música favorita, ponemos la palanca de velocidad en Drive y arrancamos.
Cabe destacar que este Mini cuenta con cuatro modos de manejo: Sport, Mid, Green y Green +, dependiendo cuál elijas, el auto será más o menos brioso en cuanto a la respuesta de motor; el rango de autonomía también dependerá mucho del modo que se elija y puede ir de los 182 kilómetros (Sport) hasta los 234 kilómetros en el modo Green +; el cual aumenta al máximo la eficiencia al grado de desactivar algunas funciones como el aire acondicionado. Cabe destacar que estas cifras son estimados, ya que dependiendo de las condiciones del camino y estilos de manejo se gastará más o menos batería. Parte del atractivo de los vehículos eléctricos es que permiten recuperar energía, ya sea con el frenado o con la inercia del rodamiento de los ejes, en este caso, el Mini SE nos permitió regenerar la carga de la batería principalmente en las pendientes pronunciadas.
El manejo en el modo Sport es ágil y con una aceleración contundente al más minimo toque del pedal del acelerador, resultado de su motor eléctrico de 184 hp y 199 libras-pie de torque, que se envían al eje delantero mediante una transmisión automática de una sola velocidad. El 0 a 100 lo alcanza en 7.3 segundos y su velocidad máxima es de 150 km/h.
Si bien es cierto que este Mini Cooper se queda muy por debajo de los rangos de autonomía que ofrecen otros vehículos del segmento, lo que promete a los entusiastas de la marca es un manejo y sensaciones muy similares al de sus hermanos de gasolina, apuesta por brindar a sus ocupantes una experiencia de conducción bastante ágil y deportiva, sensación que se incrementa gracias a su ligereza y a su centro de gravedad bajo, resultado de utilizar un paquete de baterías pequeño.
Los tiempos de recarga en este tipo de vehículos son fundamentales para considerar su adquisición, en este caso el Mini SE con el wallbox de 7.4 kw tarda aproximadamente 3.2 horas en recuperar de 0 al 80% de su carga y 4.2 horas de 0 al 100%. En un cargador rápido de 50 kw, el tiempo aproximado de recarga es de 35 minutos para alcanzar 80% de su capacidad y 1.4 horas para recargarse por completo. En una toma de corriente tradicional y con su cargador portatil tardará en promedio unas 14 horas en racargarse por completo.
Este vehículo eléctrico apuesta principalmente por una movilidad urbana con un enfoque premium, pensado para satisfacer las necesidades de transporte de aquellas personas que recorren trayectos relativamente cortos y que no les importe estar recargando las baterías del auto casi todos los días o incluso a cada rato. No es un auto pensado para salir a carretera y de ser así, se tendría que identificar muy bien los puntos de recarga del auto que pudieran llegar a encontrarse en la ruta.
Es así como Mini ejecutó un concepto totalmente electrificado que todos los entusiastas de la marca buscan obtener un Mini Cooper, esperemos que más adelante y en un futuro no muy lejano el rango de autonomía aumente para poder obtener más kilómetros de diversión al volante.
Si bien es cierto que el Grupo BMW tiene plataformas 100% eléctricas con altos rangos de autonomía, Mini es una marca que siempre ha buscado a ese conductor que ama la ciudad, que ama descubrirla y que necesita un auto ágil y de muy fácil uso en la urbe de hierro, es por ello que el Cooper SE nos presenta elementos muy enfocados en ello.
El primero es el rango de autonomía, que, con 234 kilómetros, podría sonarnos a poco, tomando en cuenta lo que podemos encontrar en otros modelos, pero en realidad es una cifra más que suficiente para nuestros recorridos diarios, que nos permitirá no recargarlo en un par de días, mientras disfrutamos de las bondades de un propulsor eléctrico, que con 199 libras-pie de torque, que llegan de inmediato, nos permitirá salir rápidamente de un semáforo o bien, enfrentar una calle con pendiente.
Además, al ser totalmente eléctrico, tenemos la oportunidad de circular todos los días, obtener algunos beneficios económicos entre el costo de la gasolina y el de la energía eléctrica, reducción de impuestos, así como olvidarnos de la verificación vehícular.
Todo ello, con ese estilo cool y desenfadado de Mini, que de nueva cuenta busca mantener ese espíritu joven sus detalles en color amarillo limón, los gráficos de la pantalla multimedia, el indicador luminoso del tablero e incluso el diseño del cargador de pared, que sigue este estilo desenfadado de la marca británica.
También, la configuración de la posición de las baterías, en forma de T, entre el eje trasero y el motor, ayuda a que tengamos los elementos más pesados muy cerca del suelo, reduciendo el centro de gravedad del auto y elevando la emoción al volante.
COMIDA FAVORITA: La sopa de nopales y la pasta.
PASATIEMPOS: Leer, pintar y jugar juegos de mesa.
Comencé a actuar muy chiquitita, pero mi familia me limitaba a obras escolares, querían que tuviera una infancia normal. Mi primo Jonás necesitaba una niña que hiciera berrinches de primera y pensó en mi, hice una pequeña participación en Año uña cuando tenía 7 años. Ese fue mi primer trabajo dentro de la industria.
Después de un año caótico de pandemia llegó Las Bravas, la cual cambio mi vida. Crecí como actriz, crecí como persona y locamente crecí en redes sociales. Lo que viene para mi es la tercera temporada de Control Z.
Me pareció el coche más tierno y moderno que he visto en mi vida. Me encantan los colores eléctricos y lo sencillo que es manejarlo.”
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